Publicado  martes, 4 de agosto de 2009

Tradiciones Mexicanas

Publicado  sábado, 1 de agosto de 2009


1.1. Introducción.


Las tradiciones son todos aquellos legados culturales, sociales, personales, regionalistas y elementos del folklor de una sociedad que se hereda de generación en generación y se transmite por medio de la costumbre a otras generaciones. Podría decirse que tradición es todo aquello que identifica a un pueblo o una patria y que le da un sentido nacionalista y de pertenencia a una región o situación histórica y cultural enmarcada en actos y costumbres únicas e inmutables.


Las tradiciones mexicanas son todos aquellos sucesos o acontecimientos que tienen un rito muy especial y un toque muy propio para dar a conocer una festividad, un acontecimiento o un hecho de relevancia en la sociedad, si bien, las tradiciones cambian de región en región en la república mexicana, todas ellas conservan la idiosincrasia que caracteriza a nuestro pueblo: Las fiestas, el color, los sabores y el folklor, representan ante el mundo una visión diferente de nuestra inmensa herencia cultural.


Descendientes de una mezcla de culturas, el mexicano sabe hacer fiesta, pero sobre todo sabe conservar tradiciones y seguirlas; desde la época de la colonia hasta nuestros días, son innumerables las reacciones tradicionales que nos identifican como un pueblo lleno de misticismo, magia, color y sabor.


1.2. El enfoque nacionalista de las tradiciones.


La esencia de las tradiciones mexicanas radica en la reflexión acerca de la nacionalidad y el lugar que ocupa México en el plano mundial; desde el surgimiento de la nueva raza en la época de la conquista, en donde no se identificaba como español ni como mesoamericano al colono del territorio mexicano, nació la interrogante nacionalista del ¿Cómo somos? Recibiendo de inmediato diversas respuestas desde diferentes enfoques del quehacer del poblador. Estas respuestas quedaron plasmadas en obras plásticas, musicales, teatrales, filosóficas, literarias, históricas y demás disciplinas intelectuales que hasta la fecha, persisten en la cultura popular del mexicano del siglo XXI.

Dentro del ámbito filosófico, a la pregunta del ¿Cómo somos? siguieron otras interrogantes: ¿por qué somos como somos? ¿En dónde radica la originalidad de la cultura mexicana? ¿Cuál es su esencia?, buena parte de la discusión acerca de la cultura se centró en el análisis de la relación entre lo mexicano y lo universal, lo que trajo como consecuencia la concepción de la identidad nacional tan necesaria para sentirse pertenecientes y propios de una cultura.

A lo largo de la historia, el colono nacional, desarrollo actos y acciones que terminaron por volverse, en primera instancia, costumbres para después convertirse en tradiciones que le hacían diferente del resto de los americanos. Los primeros cronistas de nuestra historia que relatan el encuentro de la cultura occidental con la mexicana, dan amplio testimonio del profundo espíritu religioso de los pueblos indígenas y de cómo este espíritu abarcaba también las costumbres y hábitos alimentarios, de vestido, de trabajo y por consecuencia de celebración; es decir, existía toda una tradición gastronómica, de vestimenta y de labor que la convertían en celebración y que estaba estrechamente vinculada a las creencias y ceremonias religiosas.

Con la evangelización, estas costumbres primitivas de los prehispánicos, se modificaron hasta llegar a convertirse en tradiciones populares del pueblo mexicano, tal es el caso de la cuaresma, el día de los muertos, las posadas y la navidad, las fiestas de los santos patrones como lo es de el día de la Guadalupana y un sinfín de fiestas y actos de celebración que son únicos e irremplazables y que le dan identidad en el plano mundial de poseer y tener el espíritu mexicano.

Con la consumación de la identidad nacional, surge la adecuación popular por parte del mexicano, ligada a la conducta del individuo, la cultura y el contexto socio-político de las generaciones, dando lugar a pequeñas modificaciones y ajustes a las celebraciones, sin que estas pierdan su esencia tradicional arraigada ya desde sus concepciones.

1.3. Tradiciones más Representativas de México.

El calendario mexicano está lleno de celebraciones, ritos y tradiciones muy representativas de la cultura: días de feria, feriados, de fiesta y de solemne respeto son los que se haya dentro de los doce meses en la vida de los pobladores de México, que llenas de color, de alegría y sobre todo de su especial forma de celebrar, esperan ansiosas su día para ser recordadas, revividas y disfrutadas.

Sin lugar a dudas, el inicio del año en México se ve engalanado con una fiesta religiosa perteneciente al cristianismo de la cultura occidental, pero adecuada muy al estilo mexicano, como lo es el día de la candelaria.

El 2 de febrero, día de la Candelaria, constituye cada año el final del periodo navideño, pues es cuando el Niño Jesús fue presentado en el Templo por sus padres, según la costumbre judía.
En el Día de la Candelaria se hace el "levantamiento del Niño Jesús", que consiste en llevar la imagen a bendecir al templo, así como levantar y quitar todas las figuras de los nacimientos para guardarlas hasta la celebración de la próxima Navidad.


También es costumbre popular que ese día, quienes el 6 de enero anterior durante la partida de Rosca de Reyes les tocó el "muñeco", ofrezcan a amigos y familiares atoles y tamales, que es el alimento que podían adquirir las personas más humildes.


Aquellos a los que les tocó el muñeco de la Rosca de Reyes, son los que deberán presentar al Niño Dios en el templo. Para esto, hay que vestirlo el primer año de bebé, el segundo de hombre y el tercero de rey y se le coloca en un pequeño trono. Aunque hay personas que prefieren vestirlo de alguna profesión o incluso con la camisa de su equipo de fútbol favorito. Es en este acto religioso también cuando se presentan a bendecir en el templo los cirios, las velas y las canelas que servirán de medio espiritual en caso de que durante el año haya una defunción en el hogar.
En la creencia popular prehispánica mesoamericana, este día marcaba el inicio del año agrícola, esta tradición prehispánica establecía que se debía llevar tamales cuando se rendía culto a Tláloc, a Chalchiuhtlicue (dioses del agua) y a los tlaloques (ayudantes del primero), quienes derramaban su lluvia preciosa sobre la tierra, lo que provocaba buenos frutos.


El Día de la Candelaria es resultado del sincretismo de dos culturas y religiones: la católica, que remite a cuando la Virgen María llevó al niño Jesús al templo, y la prehispánica, en la que se llevaban tamales al rendir culto a los dioses.


Otra celebración adecuada a la vida popular de México es la cuaresma, que es una tradición cristiana ajustada a la gastronomía de mexicana, rica de elementos de origen vegetal que son usados durante esta celebración; platillos típicos que se remontan a la época prehispánica como los nopales, el aguacate, flor de calabaza, huauzontles, verdolagas, papas, moles y tamales, por citar algunos, son los alimentos que engalanan la mesa del mexicano en la tradición de los cuarenta viernes de preparación a la semana santa.


Al término de la cuaresma e inicio de la semana mayor o santa, en México se llevan a cabo diferentes ritos religiosos que conmemoran solemnemente la pasión de Jesús. Procesiones, caravanas, sacrificios, canticos y actos religiosos cobran vida el jueves santo, viernes santo y sábado de gloria, culminando con una tradición colonial cuando la gloria se abre y es la quema de los judas.


El Día de Muertos es una celebración mexicana de origen prehispánico que honra a los difuntos el 2 de noviembre, comienza el 1 de noviembre, y coincide con las celebraciones católicas de Día de los Fieles Difuntos y Todos los Santos. Los orígenes de esta celebración son de antes de la llegada de los españoles y pertenece a los aztecas, mayas, toltecas, purépechas y totonacas.


Los rituales que celebran la vida de los ancestros se realizan en estas civilizaciones por lo menos desde hace tres mil años. En la era prehispánica era común la práctica de conservar los cráneos como trofeos y mostrarlos durante los rituales que simbolizaban la muerte y el renacimiento.


El festival que se convirtió en el Día de Muertos era conmemorado el noveno mes del calendario solar mexica, cerca del inicio de agosto, y era celebrado durante un mes completo. Las festividades eran presididas por la diosa Mictecacíhuatl, conocida como la "Dama de la Muerte" actualmente relacionada con "la Catrina" y esposa de Mictlantecuhtli, Señor de la tierra de los muertos. Las festividades eran dedicadas a la celebración de los niños y las vidas de parientes fallecidos.


Cuando llegaron a América los españoles en el siglo XVI, se aterraron por las prácticas, y en un intento de convertir a los nativos del nuevo mundo, hicieron coincidir las festividades católicas del Día de todos los Santos y Todas las Almas. Los españoles combinaron sus costumbres con el festival similar mesoamericano, creando un sincretismo religioso, dando lugar al actual Día de Muertos.


Sin lugar a dudas, el lugar de la república mexicana más representativo de esta fiesta es Michoacán, en donde los pobladores de Patzcuaro y todos los pueblos de la zona lacustre velan durante la noche del 2 de noviembre las tumbas de los difuntos, que son adornadas con flor de cempasúchil, agua miel, velas, retratos, papel picado y alimentos tradicionales en simbolismo del retorno de los muertos al mundo de los vivos.

La Navidad es una celebración de origen religioso del cristianismo de occidente, en la cual se conmemora el nacimiento del redentor, el hijo de Dios que se hizo hombre para salvación de los pueblo. Básicamente, esta celebración comienza al día siguiente del día de nuestra señora de Guadalupe, el día 13 de diciembre, es en este día cuando en los hogares mexicanos se pone el tradicional nacimiento, que son figuras de barro, yeso o madera que representan el pasaje de la natividad; La virgen María, José, ángeles y pastores son los que aparecen montados en un pesebre sobre la llamada tecáta o flor de piedra y sobre el eno.


Nueve días antes del 25 de diciembre, se celebran las posadas, nueves estaciones que recorren los peregrinos en su viaje a Belem; cada noche de posada le toca a un vecino o colono, el cual prepara el tradicional ponche de frutas, los aguinaldos y las piñatas para después del rezo del santo rosario, los invitados degusten en una verbena de alegría, juegos pirotécnicos y villancicos.
Esta tradición se remonta a la época de los españoles en donde se celebraban nueve misas antes de la natividad, como forma de preparación para el nacimiento del niño Jesús, esta celebración estaba reservada en un inicio solo a los Españoles peninsulares en México, después pasó a ser del dominio popular y una celebración que en España ya se perdió pero en México evoluciono hasta llegar a ser lo que en la actualidad es el rito de las posadas.


Aunada a esta tradición, en México se ha adoptado una de reciente concepción que la mayoría de los mexicanos relaciona como época de vacaciones y de descanso: el maratón Lupe Reyes, que es un puente festivo que inicia el 12 de diciembre con el día de la virgen de Guadalupe y termina con el día de los reyes magos el 6 de enero.


Incienso, velas, flores, sabores, colores, fuegos, luces, vestidos, alimentos, cantos y ritos son los elementos de las tradiciones mexicanas, que forman parte de la cultura popular y hacen que nos sintamos orgullosos de ser mexicanos. Las celebraciones son parte esencial de la cultura e idiosincrasia del pueblo de México que orgulloso de si, lanza al mundo el grito de México lindo y querido.



Bibliografía
· Ramos, Samuel: El perfil del hombre y la cultura en México, México, Imprenta Mundial, 1934.
· López Vital Ortiz, Mario: El camino florido, México.
· Moreno, Roberto, Instituto de investigaciones bibliográficas de la UNAM
· Ciencias Sociales, México su evolución cultural, SEP 3 grado de secundaria 1984, Porrúa.
· List Arzubide, Germán. Tlatoani, Edit. Porrúa, 1975.

Meseta Purépecha

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1. Introducción.


La meseta purépecha es una región del centro occidente de la república mexicana que abarca parte de los Estados de Querétaro, Guanajuato, Guerrero y Michoacán, teniendo más presencia en este último; El pueblo purépecha data del siglo XIV en la región de Michoacán y hasta la fecha perduran aún regiones que son consideradas como habitadas por purépechas. Este pueblo no sucumbió a la conquista española y son hoy un pueblo con una identidad propia.


Don Vasco de Quiroga realizó una obra valiosa y apreciada, formando escuelas y pueblos donde fomentó, conforme a la costumbre purépecha, el desarrollo de la actividad artesanal que hoy perdura.


La región está integrada por 13 municipios y se ubica al centro norte del estado de Michoacán, entre los municipios pertenecientes a la meseta destacan Uruapan, Angahuan, Paracho, Cherán, Patzcuaro, Nahuatzen y Tzintunztan, todos ellos vigilados por el eje volcánico que cruza el estado michoacano.


Una característica de la Meseta es la importancia de su población indígena, aun cuando parte de ella ha venido sufriendo un proceso de aculturación. No obstante, la lengua y la pertenencia étnica, entre otros factores, son elementos que dan cohesión y mantienen firmemente arraigada la cultura purépecha.


En la actualidad, En los 13 municipios de la Meseta Purépecha se ubica la mayor parte de la población indígena del estado; ahí habitan 70 mil 708 indígenas, los que representan 58 por ciento de los que se encuentran en el estado.


Es una región de contrastes, ahí se incluye uno de los municipios con mayor desarrollo industrial, Uruapan, pero incluye cuatro municipios con alta marginación: Charapan, Chilchota, Nahuatzen y Tancítaro. En ellos viven 29 mil 40 indígenas, lo que representa más de 23 por ciento de la población indígena total en el estado.


Otros cinco municipios, Cherán, Paracho, Taretan, Tingambato y Ziracuaretiro se encuentran en un nivel medio de marginalidad y sólo cuatro, Nuevo Parangaricutiro, Peribán, Los Reyes y Uruapan, están clasificados como de baja marginalidad.


1.1. Generalidades de la Meseta Purépecha.


La Región de la meseta purépecha, por su ubicación geográfica, tiene una variedad de tradiciones, costumbres y quehaceres diarios en sus pobladores que se han venido transmitiendo de generación en generación a lo largo del tiempo; cabe mencionar que algunos autores y estudiosos llaman a esta región también con el nombre de Meseta Tarasca, titulo despreciativo impuesto durante la evangelización española derivado de los ritos de estos pobladores considerados como inhumanos y canibalismos. Tarasca es la castellanización de la palabra francesa tarasque, un monstruo mitológico del sur de Francia que comía humanos. En España se usa también para describir a una mujer pesada, sinvergüenza, poco aseada, gruñona y/o extremadamente fea. Existe también la forma masculina tarasco, aunque está mucho menos extendida. Referirse a este grupo étnico de Michoacán como los Tarascos, denigra totalmente su origen prehispánico y su tradición ancestral.


1.1.1. Historia del pueblo purépecha.


Entre los siglos XV y XVI, el imperio Purépecha, con capital en Tzintzuntzan, fue una potencia mesoamericana de primera magnitud que resistió el empuje del imperio azteca. Su influencia cultural abarcaba (de sur a norte) desde los límites del Estado de Michoacán y Guerrero hasta lo que hoy es el Estado de Nuevo México de los EEUU y desde la costa oeste de México hasta los estados de Jalisco, Guanajuato y Querétaro, de hecho, estos dos últimos nombres forman parte de la toponimia purépecha. Su éxito militar y económico se debió en parte a que los purépechas eran hábiles trabajadores de metales como el cobre y bronce. Este factor sin duda ayudó a mantener su independencia de los aztecas. Los purépechas antiguas eran hablantes exclusivos del idioma purépecha, una lengua aislada que no guarda relación histórica demostrada con ninguna otra en la región.


El mayor personaje en la historia de los purépecha es el rey Tariácuri (sacerdote del viento) nacido en el siglo XIV, un símil de Topiltzin Quetzalcóatl. Durante el reinado de Tariácuri el pueblo purépecha se consolidó como un poderoso imperio cuya influencia se expandió enormemente lo largo de Mesoamérica. Al final de su vida, Tariácuri dividió administrativamente su imperio en tres reinos, uno resguardado por su hijo Hiquíngare y los otros por sus dos sobrinos Hirípan y Tangáxoan.


El "caltzontzin" (señor de las innumerables casas) o señor michoacano Tangaxoán II se sometió sin presentar resistencia ante el conquistador hispano Cristóbal de Olid con el objetivo de salvar a su gente y de negociar un tratado de paz. En 1530 el gobernador y presidente de la Primera Audiencia Nuño de Guzmán saqueó la región, destruyendo templos y tumbas en búsqueda de metales preciosos. Asimismo, mandó ejecutar a Tangaxoán II, después de someterlo a un juicio en que se le acusó de dar muerte a españoles, mantener ocultamente su antigua religión y alentar la desobediencia. Esto provocó un caos en la región. Muchos indígenas huyeron a los cerros y ocurrieron diversos episodios de violencia.


1.1.2. Religión.

Tradicionalmente se ha considerado que la religión purépecha prehispánica era de tipo politeísta. Aunque José Corona Núñez (1999) sugiere que creían en un principio creador conformado por una parte masculina Curicaveri o Curicaheri y otra femenina Cuerahuáperi. Existía también la "palabra" o "soplo divino" o mensajero, llamado Curitacaheri. También esta triada se puede ver como la madre, el padre y la creación del nuevo ser; mientras que el principio creador masculino se representaba por medio de el Sol, el principio creador femenino por la Luna y el producto o mensajero era Venus.


El cosmos de los purépechas estaba formado por tres mundos: el mundo de los muertos Cumiehchúcuaro situado bajo tierra, el mundo de los vivos Echerendo situado en la superficie de la tierra y el mundo de los dioses engendradores Aúandaro situado en el cielo. Mientras que el cosmos se dividía en cinco diferentes direcciones, cada una custodiada por deidades llamadas Tirépemes:


Dirección Oriente: identificado por el color rojo, lugar donde renace el sol y custodiada por Tirépeme-Quarencha.


Dirección Occidente: identificado por el color blanco, lugar donde moría el sol y custodiada por Tirépeme-Turupten.


Dirección Norte: identificado por el color amarillo, dirección del solsticio de invierno y custodiada por Tirépeme-Xungápeti.


Dirección Sur: identificado por el color negro, entrada al paraíso (tlallocan mexica) y custodiada por Tirépeme-Caheri.


Dirección Centro: identificado por el color azul, lugar donde renace el sol y custodiada por Chupi-Tirépeme.


Cada Tirépeme era una manifestación (hermano) de Curicaveri, y cada dirección representaba una estadía (casa) del dios sol-fuego. A cada dirección estaban adjudicadas distintas propiedades, haciendo parecer que cada Tirépeme era una deidad diferente.


Algo similar ocurría con Cuerahuáperi ('desatar en el vientre') que es la gran creadora, dadora de vida y de muerte, ella también tenía cuatro manifestaciones (hijas) que eran las nubes de las cuatro diferentes direcciones (simbolizadas por diferentes colores); las cuales podía hacer germinar la vida con lluvias adecuadas, ahogarla con torrenciales aguaceros o destruirla con granizadas y heladas.


La más importante manifestación de Cuerahuáperi era su hija Xarátanga ('diosa de los mantenimientos') representada por la luna nueva, mientras que su madre resulta ser la luna menguante (vieja). De una manera similar a que el sol de oriente es hijo o "renacimiento" del sol muerto en occidente, Xarátanga (la luna nueva) es la renovación de Cuerahuáperi (la luna menguante).


De esta forma las manifestaciones del principio creador adquiere diferentes formas y nombres de acuerdo a la dirección y el estrato del cosmos del que se trate. Sugiriendo una religión politeísta conformada de un amplio panteón, visión que no es adecuada.


1.1.3. Comida y cocina regional.


Al igual que en otras partes de México, la cocina regional de la Meseta Purépecha se basa en el uso de maíz y chile, complementada por la calabaza, frijoles, carne, pescado y queso. Entre los platos más reconocidos son "atole" y "churipo", acompañada por tortillas o corundas.


Corundas se preparan con el maíz que ha sido hervida en agua con cenizas de madera en lugar de cal, después se lava la mezcla de tierra. Se coloca una cucharada de la mezcla en una hoja de maíz, en forma de una forma triangular y al cuece al vapor. Otro tipo de corunda, llamado "charikurinda," es una corunda negra en el que el ingrediente principal es el frijol, envueltos en hojas de maíz.


El Churipo es una sopa a base de carne guisada preparado con col, zanahorias, garbanzos, sazonado con Chile, y se sirve con corundas. Este guiso es la comida de la región, se consume como platillo de fiesta.

Los tamales son masa de maíz rellenos con carne y chile, similares a otras regiones de México, pero aquí se les llama "nacatamales". Otro tamales típicos de Michoacán es el "uchepo", que se prepara con maíz fresco de tierra en una superficie curvada de piedra llamado un "metate", envuelto en hojas de maíz y al vapor; los uchepos se sirven como acompañamiento de la carne de cerdo cocida con tomate y chile, o bañada en crema.


La gran variedad de atoles es una característica distintiva de la región purépecha. Preparado para el consumo diario se puede encontrar la base de atole blanco de bebidas preparadas a partir de maíz molido llamado "Chila-atole", así como otras variedades con sabor a frutas como tamarindo o mora. Existe otra variedad de atole que es típico de la región y es el llamado "chaqueta", este se elabora a base de cascaras de cacao y pelos de elote que son quemados en una olla de barro. Otro atole típico del estado es el "atole de grano", es de color verde, es una sopa dulce hecha de maíz y anís, sazonado con chile.


Además de estos alimentos, la dieta de la Meseta Purépecha también incluye la caza silvestre. Durante las fiestas, se consumen otros platos tales como la calabaza y la calabaza con piloncillo y canela.


2. Pueblos Purépechas y sus características.


2.1. Angahuan.


Ubicado en el corazón del eje volcánico michoacano, es un pueblo pintoresco que fue fundado antes de la conquista. Es uno de los pocos lugares de la sierra michoacana que ha conservado su aspecto original, con casas de madera (trojes) techadas con tejamanil.


Existe en el lugar la Capilla del Hospital, así como el Templo Parroquial de Santiago Apóstol, de estilo morisco, de mediados del siglo XVI, con una cruz atrial de piedra, bellísima obra con el sello inconfundible de las manos indígenas. Aquí se encuentra también el Centro Turístico de Angahuan, que además de ofrecer servicios de restaurante, cabañas, áreas de campismo y un espacio museográfico, tiene el atractivo de estar situado a muy corta distancia del Volcán Paricutín y de las ruinas del pueblo de San Juan Parangaricutiro, que quedó sepultado bajo la lava. Desde ahí se pueden emprender paseos a caballo hasta la zona del volcán.


Actualmente es el pueblo más cercano al paricutín, luego de que en 1943 la lava del volcán cubrió 40 kilómetros cuadrados destruyendo en su paso al poblado de San Juan Parangaricutiro.


La iglesia, dedicada a Santiago apóstol, tiene una fachada labrada en cantera y es considerada como una de las obras más representativas del estilo plateresco en Michoacán, esta iglesia pertenecía al curato de Zirosto para después pasar a la orden de Uruapan. El mayor interés de esta iglesia es su antigüedad y estilo, en la fachada se lee la fecha de 1562, que indica el año de su terminación. Su rasgo mas sobresaliente es la filiación con el estilo mudéjar que en la portada muestra alfices y ventana coral.


En lo alto de sus muros hay un friso, lo complicado de su posición y caracteres generó controversias ya que las letras no se distinguen si eran de moros, de indios o de españoles, pero solo se trata de una inscripción en latín dedicada a Dios y a Santiago Apóstol. Otra característica interesante de este poblado es el centro turístico del paricutín. El volcán que nació en el año de 1943 en la parcela de un campesino que araba su tierra en el poblado de san Juan de las colchas, es considerado el más joven del mundo y activo actualmente.


La historia relata que el señor Dionisio Pulido se encontraba trabajando la tierra en las cercanías del pueblo Paricutín, cuando de pronto empezó a temblar, se abrió la tierra, empezó a salir vapor muy espeso, un sonido muy fuerte y piedras volando, el Sr. Dionisio se asustó mucho y avisó al pueblo.


La duración de la actividad de este volcán duro 9 años 11 días y 10 horas, la lava caminó unos 10 km. No hubo víctimas humanas, hubo suficiente tiempo para que todos se salvaran, solo sepultó dos poblados: Paricutín y San Juan Viejo Parangaricutiro (Parhikutini y Parangarikutirhu en purépecha). El primero quedó totalmente borrado del mapa pues muy cerca de él se encuentra ahora el cráter del volcán. Del segundo pueblo sólo es visible la iglesia que quedó sepultada por la lava al igual que el resto del pueblo, excepto por la torre izquierda del frente (la torre derecha aparentemente cayó pero lo cierto es que estaba en construcción al momento de empezar el fenómeno) y la pared de atrás junto con el altar.


En Angahuan el clima siempre es frío, pero más en noviembre y diciembre, y es necesario llevar puesto una abrigadora chamarra o bien las mujeres puede comprar un rebozo tejido a mano que elaboran las indígenas de la comunidad.


Angahuan es una de las comunidades donde la población aún conserva sus tradiciones y costumbres. Los alimentos los preparan al fuego de la leña y el humo baña el ambiente, pero en vez de molestar nos traslada al calor de hogar, mucho más cuando pruebas las deliciosas tortillas hechas de maíz recién cortado, o los elotes cocidos o asados.


En la plaza principal de Angahuan hay una Iglesia de lodo y piedra que fue edificada por manos indígenas en el siglo XVI, en este templo mujeres, hombres y niños le rinden honor a Santo Santiago, quien desde el altar parece observar con curiosidad aquellos cuerpos femeninos vestidos de huanengos de colores vivos y hasta chillantes como el verde, naranja y rojo; además portan enaguas negras que miden unos 6 metros de ancho pero que van plisados al cuerpo y encima de estas un delantal, también de color fuerte, que es adornado por enormes encajes.


En el arreglo personal de la mujer no pueden faltar las gruesas trenzas negras que son engalanadas por listones de colores. Las mujeres más jóvenes usan zapatos de tacón, pero las mayores andan descalzas sobre la tierra y el pasto. Las mujeres indígenas en su hogar, prenden el fogón y en una olla de barro ponen a cocer los frijoles. Después echan fuego a otro fogón donde colocan enorme comal donde ponen a coser tortillas hechas a mano. Los niños y esposo esperan a que la mujer les sirva un plato de frijoles, tortillas y una salsa picosa.

2.2. Paracho.

Paracho es un municipio que se encuentra dentro de lo que es la región de la meseta Purhépecha, y está integrada por las comunidades de Paracho (cabecera municipal) Aranza, Cheranastico, Ahuiran, Nurio, Pomacuaran, Quinceo, Urapicho y Arato. La región de la meseta Purhépecha, y principalmente la región de Paracho, es una región con clima templado-húmedo con lluvias en verano con bosques mixtos de pino-encino, de pino, de encino, de oyamel y madroño.


El municipio de Paracho es rico en tradiciones y costumbres, principalmente porque en la mayoría de las comunidades que integran el municipio de Paracho se habla todavía el Purhépecha y se conserva el vestuario tradicional en la mujer, el cual consta de enagua, rollo, blusa, delantal y reboso. También se puede decir que la música y la danza son parte esencial de las comunidades del municipio de Paracho, ya que existen alrededor de 20 bandas de música, 10 orquestas, aproximadamente, y un gran número de danzas tradicionales (danzas de viejitos, negritos y pastorelas), se pueden apreciar, también, iglesias del siglo XVII, viviendas típicas construidas a base de madera, tabique y adobe; visitar la casa de la cultura (antiguo internado), el mercado de antojitos (comida tradicional), y el mercado de artesanías en la comunidad de Paracho, así como la gran variedad de artesanías, principalmente las guitarras, fabricadas completamente a mano por artesanos de la comunidad, siendo importante destacar la realización de la Feria Nacional de la Guitarra.


Dentro del parador turístico Tata Vasco se pueden realizar actividades tales como: campamentos, caminatas, practicar deporte (básquetbol, voleibol), atletismo, ciclismo, etc. Así también se puede observar la flora y la fauna existente dentro del parque, pero sobre todo se puede pasar un rato agradable con el objeto de descansar con mucha tranquilidad; también se puede realizar un recorrido por la comunidad de Paracho y ver la gran variedad de artesanías que ahí se producen y ver de cerca el proceso de su construcción, sobre todo la guitarra, que es el instrumento que caracteriza a la población, en donde se encuentra la guitarra más pequeña del mundo ganadora del record Guines, y disfrutar de la Feria Nacional de la Guitarra que se realiza en el mes de agosto.


El municipio cuenta con monumentos arquitectónicos como son: la Casa de la Cultura, templo de San Gerónimo en Aranza, templo de Santiago Apóstol de Nurio considerado como la Catedral del Arte Novohispano Purépecha, templo de San Miguel Pomacuaran.


Las danzas populares e la región son: Danza de Los Moros, Danza de los Viejitos y la Danza de los Negritos. Así mismo su música que son Popular indígena, pirecuas y música de viento. Siendo una comunidad la cual es reconocida mundialmente por su artesanía que la que más prevalece son las guitarras y también tallados de madera, muebles, juguetes, mascaras y güiros, laudería, rebozos. La gastronomía de este lugar es de gran agrado la cual cuenta con diversos platillos que son churipo, atole de grano y corundas.

2.3. Cherán


Se encuentra en la parte noroeste de Michoacán, El Municipio Cherán tiene una población de 16.243, mientras que la Localidad tiene 12.616 habitantes de los que 5.827 son hombres y 6.787 son mujeres. Es una población que existió antes que se formara el imperio purépecha de Patzcuaro, durante la conquista española, llegaron misioneros franciscanos, que formaran grandes haciendas productivas, tomando la mano de obra indígena para el trabajo. En 1533 a la llegada de los españoles se le rebautiza con el nombre de San Francisco Cherán, otorgándole el título real por Carlos V. Es probable que los primeros en llegar a Cherán hayan sido los frailes Martín de Jesús y Juan de San Miguel, porque fueron los primeros evangelizadores de esa región; pero hay noticias de Fray Jacobo Daciano, que permaneció en ese lugar durante algún tiempo y seguramente, fue quien construyó una iglesia en el mismo lugar donde se encuentra la actual.


La población de Cherán es recurrente a las artes místicas y la brujería, desde su fundación prehispánica, era un lugar sagrado para los purépechas ya que en esas tierras se establecieron los médicos y hechiceros del imperio, durante la evangelización, los franciscanos se percataron de la magia y misticismo de los pobladores de esa zona, condenándolos como diabólicos y herejes, por lo que esta localidad pasó a ser famosa por los lugareños y los visitantes como un lugar de brujas.


También cuenta con tradiciones que marcan su origen y sus costumbres como lo es en el año nuevo y Santos Reyes, se acostumbra la danza de los negritos; el 2 de febrero, danza de los viejitos; en la fiesta de San francisco de Asís, la danza de los moros; el 1o. y 2 de noviembre, en los panteones se hacen ceremonias, en Corpus Christi, se hace un desfile, en donde los hombres cargan panales de miel y las mujeres llevan vestidos finamente bordados.


Su música son las pirecuas y la música de banda las cuales tienen gran apreció para los habitantes.


Sus artesanías que son reconocidas en muchos lugares son piezas de madera, guitarras, maracas, yoyos, baleros, etc., madera torneada como columnas y puertas. Textiles, blusas de manta tejidas con gancho y deshilados o relindos, delantales bordados en punto de cruz con hilo de un solo color.


Su gastronomía es un deleite para el paladar y son comidas que son de muy buen sazón las cuales son guisado, llamado churipo. Comida regional a base de maíz; corundas, uchepos, mole de guajolote y atole de grano. Normalmente lo acompañan con las bebidas típicas de la comunidad que es Charanda.


2.4. Nahuatzen.


Pueblo fundado por purépechas con el nombre de Yahuani, es un lugar enclavado en lo alto de la sierra michoacana en donde las temperaturas son frías y húmedas, de allí su nombre que significa Lugar donde hiela. Entre su arquitectura, resalta n monumentos históricos como la Parroquia de san Luis Rey en la cabecera municipal; parroquia del Espíritu Santo y capilla del mismo nombre; parroquia de Santa María y capilla del antiguo hospital en la localidad de Sevina; en Comachuén, capilla de Santa María; en Turícuaro, templo de San Andrés y Casa Cural.


La fundación de Nahuatzen, se llevó a cabo a mediados del siglo XVI por gentes de Xaracatan, llamado por los españoles San Juan Zaracatán situado a unos tres kilómetros y medio al sureste del actual pueblo de Nahuatzen.


La fundación de Nahuatzen, según la tradición, una parte de los de Nahuatzen, vinieron de un pueblo llamado “El Cortijo” se vinieron a Nahuatzen, porque les gustó para descansar, este pueblo “El Cortijo” estaba junto a una laguna pero ya tenía muy poca agua, por lo que decidieron abandonarlo, luego se les unieron otros pequeños pueblos como fueron: San Miguel, Xaracatan El Rincón y algunos otros y todos convinieron en formar un solo pueblo.


Sus Fiestas, danzas y tradiciones son conservadas desde sus orígenes las cuales hacen q las costumbres no borren la historia las celebraciones son 25 de Agosto, fiesta del patrón del pueblo en honor a “San Luis Rey” en donde participa la Danza de los Moros, la Danza de Los Soldaditos, marichas y concursos de textiles y artesanías de madera, sin faltar sus tradicionales jaripeos. Semana Santa, representación de la Pasión de Cristo. 15 de Agosto, La Virgen de la Asunción (Danza de Moros) La fiesta en honor al Santo Cristo de Esquipulas, que se celebra en el mes de Febrero. Corpus Christi, Fiesta en honor a la Virgen de Guadalupe en el mes de Diciembre. Sin faltar sus tradicionales casamientos (bodas), con sus lúcidas costumbres, celebración de los XV años y bautizos. La música es una de las que más representan a estos lugares ya que son las de tradición y cultura los cuales son los Sones y Pirecuas, sin faltar su gusto por la música de bandas de viento.

2.5. Capacuaro.


Situado en el centro de la región de la Meseta Purépecha de Michoacán, Capacuaro es conocido por sus muebles tallados. La fiesta comienza en la noche de la 23 con las danzas de los moros y una procesión por la localidad y termina el 25 con una serenata de canciones y un mercado artesanal.


El primer día del año, es celebrado el inicio del Nuevo Año en las comunidades de Aranza, Corupo, Cherán, La Cantera y Capacuaro, entre otras. Hay música de banda, danzas y pastorelas, algunas de estas últimas con la participación de hasta ochenta actores.
En plena Meseta Purépecha. Cuenta con la Parroquia de San Juan Bautista que data del siglo XVI, en donde luce su antigua fachada de piedra rematada en forma mixtilínea con techos a dos aguas.

Bibliografía:
“Mitología Purépecha”, Edit. Instituto Michoacano de Cultura, 1999. p. 102
Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indios (2000): "Lenguas indígenas de México".
“Indios mexicanos; cultura y tradición de Michoacán”. Cécile Gouy-Gilbert, Instituto Cervantes de España, 2001

Estudio de la personalidad del uruapense

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Concepción de la personalidad del Uruapense




1.1. Estrategias del paradigma.



Estrategia psicoanalítica: La concepción de una personalidad uruapense radica en primera instancia en la pertenecía o identidad nacional; el individuo deber de sentirse dentro de una pertenencia cultural único y representativa de sus compatriotas. El lenguaje, la historia, el contexto social, la forma de gobierno, el respeto a la identidad nacional y la manera en que el individuo ve a su nación le indica como es la personalidad generalizada como partícipe de una sociedad global en primera; la subdivisión se hace en la pertenencia a una región o Estado, el regionalismo indica que debe de contener una concepción ideológica por la que, aun aceptando la existencia de una comunidad política superior cristalizada en la nación, se pretende la defensa específica de una parte de ésta que se distingue por su homogeneidad en lo físico y cultural.



Los propósitos regionalistas más esenciales son La adecuación de la acción estatal a las necesidades locales; un mayor acercamiento de los ciudadanos a la gestión del Estado; la supervivencia y promoción de las costumbres propias; y, en las regiones atrasadas, la consecución de una justa redistribución de la renta nacional que mejore sus condiciones económicas y sociales.




En materia regional, existe otra subdivisión que es en la cual se enfoca el estudio de la personalidad nata o por convicción de los habitantes de la ciudad de Uruapan: la ubicación geográfica, los ecosistemas o sistemas naturales y el desarrollo de la ciudad a lo largo de su historia son las fuerzas subyacentes que impulsan la personalidad del uruapense, manifestándose en la manera de vestir, las costumbre y tradiciones y los léxicos empleados en la zona.





Estrategia de las disposiciones: La tradición y la herencia ancestral traen como consecuencia una adopción de ciertas costumbres y maneras de ser en el individuo uruapense que lo distingue del resto de sus nacionales y regionales, teniendo en cuenta que esto es una práctica diaria y por ello se vuelve costumbre; cada familia de la ciudad posee ciertos hábitos y costumbres arraigadas ancestralmente que pasan de generación en generación; un ejemplo claro son las fiestas de los barrios de la ciudad, en donde familias enteras hacen suya la fiesta y realizan todo un ritual al elaborar alimentos específicos y hacer rutinas en los días de la fiesta.





Estrategia ambiental: En este apartado, podría manejarse la manera de desarrollo físico, biológico de las personas de la región de Uruapan: la alimentación, el desarrollo de habilidades motoras y la adaptación al clima podrían ser el otro vertiente del estudio de la personalidad: en un ejemplo, el clima de la zona de Uruapan es boscoso húmedo, la adaptación a este ecosistema ha traído como consecuencia la alteración de la personalidad cuando el uruapense emigra a otro ecosistema con otro clima, digamos el de la zona de tierra caliente de Michoacán.



Los hábitos alimenticios manifiestan un claro ejemplo de la personalidad, y el rito para la comida es consecuencia de estos hábitos: el consumo de alimentos propios de la región hacen que el individuo de Uruapan tenga ciertas características alimenticios y por ello hábitos diferentes a los otros individuos nacionales y regionales.





Estrategia de las representaciones: En este apartado, el individuo uruapense tienen una concepción de el mismo que difiere de los otros individuos de la ciudad; la división de clases sociales basadas en la actividad económica y por ende en el poder adquisitivo podría ser un factor de esta estrategia: la división social en el rubro del habitad en la ciudad maneja contrastes y matices que hacen que el individuo adopte una personalidad y un comportamiento especial: no tiene la misma forma de percepción el individuo del centro de la ciudad que opta por las conservador y tradicionalistas que el descendiente o el migrado que habita en la zona comercial de la ciudad que tiene una percepción mas pos moderna de la situación de la ciudad; el lugar de adquisición de productos y enseres también podría ser un factor determinante para la explicación de una personalidad uruapense.



1.2. Teoría de la personalidad del individuo.



Basados en el estudio científico propuesto por Carver y Scheirver en 1997, que propone que el estudio de la personalidad se debe de hacer basado en el funcionamiento Intrapersonal y las diferencias individuales. El funcionamiento Intrapersonal hace referencia a la organización psíquica -interna, privada y no observable directamente- que cada persona construye en forma única durante el transcurso de su vida; este campo abarca los grupos de teorías psicoanalíticas y fenomenológicas. Las diferencias individuales son el conjunto de características o rasgos que diferencian a una persona de las demás; a esta aproximación le corresponden las teorías de los rasgos.



Con esta breve explicación del fundamento en el que se basa el estudio de la personalidad del individuo uruapense se postula que, una teoría para dicho estudio se postula bajo los siguientes rubros: mediante el método hipotético deductivo, se mide la influencia de la personalidad mexicana y regional para llegar al caso particular de ciudad, mediante observación se ha llegado a la siguiente hipótesis:



El ciudadano uruapense posee una personalidad matizada de nacionalismo y regionalismo y que bajo a estas influencias ha creado un estilo de vida que posee un conjunto de características únicas de la región que fueron adoptadas a lo largo del tiempo, por la tradición y costumbre de la ciudad y por la adaptación al medio físico. Dicho lo anterior se tiene en consideración el constructo psicológico del individuo basado en la pertenencia a un espacio-tiempo-historia.



Tomando en cuenta la obra “EL NACIONALISMO FILOSÓFICO” de Samuel Ramos, en el cual aborda la postura de una identidad nacional, se toma en cuenta que la personalidad del uruapense viene de una larga evolución regional y nacional que da como consecuencia una vertiente en el actuar del individuo contemporáneo de la localidad: líneas evidénciales como la participación dentro de un lenguaje, una cultura, un sistema de gobierno, una calidad de vida y una posición geopolítica, dan por entendido que el individuo posee una personalidad especifica basada en TRADICIÓN, COSTUMBRE EVOLUCIONADA, tales son los casos de las celebraciones de la creación de los barrios, el significado de las leyendas de la ciudad, el trazo de los nuevos espacios de habitad, la división de clases y de trabajo y por ende la posición geográfica dentro de la localidad de los sectores sociales, que son muestra clara de la enseñanza de Vasco de Quiroga quien quiso fundar una utopía como la de Tomas Moro. Todo esto proveniente de la ideología española en ese entonces y adoptada por México.



1.3. Método de medición y evaluación.



Para fundamentar la teoría de LA TRADICION Y CONSTUMBRE EVOLUCIONADA, se pretende hacer una medición de casos particulares en la ciudad, como lo marca el método hipotético deductivo; existe una división subjetiva de la ciudad: el Uruapan viejo y el Uruapan moderno, que tiene una frontera física que son ciertas calles y avenidas dentro de la localidad; el análisis y la investigación de la teoría propuesta se dará en el Uruapan viejo, por medio de la observación: el trazado de calles, el tipo de construcciones, el tipo de gente que habita, los usos y costumbres diarias y su manera de percibir a su locatario. Con esto se generarán vertientes sobre el tipo de características físicas, sociales y de ser posibles genéticas de la población del llamado Viejo Uruapan. Se creara un supuesto en el que se analizará la personalidad del individuo referente al medio en donde se desarrolla.



Como medida principal se toma en consideración la historia y reseña de la ciudad, propuesta por Francisco Hurtado; además de tener en consideración la conformación de la ciudad bajo la regla de pueblo de indios y la división estructural social y económica de Tomas Moro. Sitiando con esto que la mayoría de la población con características generalizadas de la ciudad se sitúa en el llamado Uruapan viejo.



La forma de diversión, el arreglo personal, los hábitos alimenticios, las personas que frecuenta y los modismos lingüísticos dan referencia al tipo de personalidad de la ciudad y por ende del individuo.



1.4. Observaciones de las generalidades de los uruapense.



El individuo del Uruapan viejo, se distingue por ser partícipe de la historia viviente de la ciudad, por pertenecer a una zona geográfica importante de la localidad, manifiesta un alarde de cultura tradicionalista apegada al catolicismo y la moral; se define a sí mismo como conservador en su núcleo familiar pero liberal en sus actos sociales; libre y de tradición indígena purépecha, conoce los usos, costumbres y tradiciones de la ciudad como son la fiesta de los barrios, el inicio de la temporada de lluvias en la ciudad (15 de mayo), las historias y leyendas del parque nacional, las familias tradicionales de la ciudad y el significado del trazado de la misma.



Su comportamiento se basa en su poder adquisitivo, su situación social y su trabajo u oficio que desarrolla, meramente un postulado Quiroguista y Morista; su hábito alimenticio es tradicional, prefiere la comida más elaborada o casera de ingredientes típicos de la zona y tiene un horario específico para comer.



La educación que recibe es tradicionalista conservadora, primero en el hogar luego en instituciones de gran tradición en la ciudad como por ejemplo el Instituto México, Colegio la paz, por mencionar algunos privados.



Conoce lugares de venta de productos y enseres como “La nacional”, “El puerto de Veracruz”, “Camisería Trejo”, “la uruapense” que son de gran tradición dentro de la localidad. La familia del individuo está conformada por un matriarcado que puede ser la abuela o la madre, por lo regular viven en familias compuestas y los que conforman familias nucleares se reúnen con sus ancestros y toman en consideración opiniones y puntos de vista.



En el aspecto psíquico, el individuo uruapense tiene un pensamiento CONSERVADOR Y TRADICIONAL para sus semejantes y para él es liberal y poco autocritico; responde a estímulos de moral y buenas costumbres pero poco lo lleva acabo.



Capítulo II. Marco referencial de la ciudad.



2.1. Fundación de la Ciudad.



Antes de la venida de los españoles, Uruapan fue importante señorío durante el periodo prehispanico, fue anexado al reino tripartita de Patzcuaro en el año de 1400, la ubicación del Uruapan Prehispánico se ubica donde actualmente es el barrio de la Magdalena. Uruapan fue el resguardo del último cazonci Purépecha, Tanganxoan segundo, razón por la cual los invasores llegaron al lugar en el año 1522 aproximadamente. La violencia que tuvo la incursión de los invasores en la región encabezados por Nuño de Guzmán, para encontrar al último rey Purépecha ocasionó que los nativos se dispersaran y se alejaran de los centros urbanos.



Poco tiempo después, cuando se decide evangelizar la región, Fray Juan de San Miguel es el encargado de realizar dicha encomienda. Pero encuentra la zona de Uruapan deshabitada, decide entonces a reunir a los nativos, para evangelizarlos y darles un oficio. Al observar las ventajas geográficas de la zona como la gran cantidad de agua, sus fértiles tierras y su lugar entre tierra caliente y la sierra purépecha funda la ciudad de Uruapan con sus 9 barrios originales en el año 1533, el santo patrono de la ciudad es San Francisco de Asís.




En dichos barrios se levanto una capilla consagrada a un santo patrono para que fuera el protector de cada uno, de igual forma se trazo la ciudad según la época, las calles van de norte a sur y de este a oeste, y la posición de cada capilla se realizó para que dieran los atrios hacia otra creando una gran cruz en toda la ciudad.



Durante la colonia la principal actividad de Uruapan fue el comercio y la agricultura. A mediados del siglo XVIII Uruapan tenía la siguiente composición urbana: 9 barrios con 600 indígenas, 500 familias españolas y 300 familias de mestizos. Los pueblos aledaños se conformaban de la siguiente manera: San Francisco Jicalán, con 60 indígenas, 3 familias de mulatos y una de color quebrado; San Francisco Jucutacato, con 100 vecinos indígenas y 2 familias de color quebrado; San Lorenzo, con 75 indígenas; Tiamba, compuesta por 20 mulatos; la hacienda de Caracha, con 30 personas donde sólo el dueño era español y San Marcos, con 30 habitantes, todos ellos mulatos.



La región se caracterizó por insubordinación y brotes de violencia, entre ellos los de 1766 y 1767, se sabe que un grupo conspiró contra la Monarquía Española, entre ellos el Licenciado Michelena y el Licenciado José María Izazaga, este último destacado intelectual, que estuvo relacionado con personajes ilustres.



También tuvo su presencia en Uruapan el héroe nacional Morelos, este estuvo en Uruapan más de una vez cuando hacía su peregrinaje en su vida de arriero, pero oficialmente llegó a esta ciudad en calidad de educador y de religioso en el año de 1798. Sabiéndose de otra visita hasta 1815 en calidad de jefe insurgente, en donde se dedicó a preparar borradores de la Constitución que más tarde fue promulgada en Apatzingán.



Las autoridades de la Colonia ante el empuje de la fuerza insurgente, se vieron obligadas a pertrecharse en el interior de la parroquia de San Francisco misma que fue incendiada, obligando a rendirse a las fuerzas del virreinato. Después de este combate hubo pequeños enfrentamientos. Una vez consumada la independencia en el año de 1821, la ciudad se sumió en un letargo dedicándose sus habitantes a trabajar, así pasaron los años, hasta la época de la reforma.



En 1822 cuenta ya con Ayuntamiento Constitucional, y en 1825, el 15 de marzo, se constituye cabecera de partido y subdelegación. Se constituye en Municipio por la Ley Territorial del 10 de diciembre de 1831. Por la importancia que tuvo durante la guerra de independencia, el 28 de noviembre de 1858, se le da la nominación de Ciudad del Progreso.



Durante la invasión Francesa, cuando Morelia fue tomada, se decidió cambiar la capital del estado a Uruapan, el 24 de noviembre de 1863.



La rebeldía de la ciudad se dejó ver durante la guerra que mantuvieron los liberales y conservadores, donde suscitó el apresamiento y fusilamiento de los Mártires de Uruapan, mismos que tiempo antes habían decidido organizar sus tropas en una “Gran Parada” que hicieron en el entonces oriente de la ciudad, donde actualmente existe una placa en la esquina del Paseo Lázaro Cárdenas y la calle Gran Parada.



2.2. Significado de Uruapan.



Existen varias versiones acerca del significado de la palabra Uruapan, una de ellas, del padre Maturino Gilberti dice que dicha palabra proviene del vocablo Urani, que significa “jícara” en alusión a una de las artesanías tradicionales de esta región.



Otra versión aceptada por los sociólogos e historiadores, es la que proviene del diccionario Tarasco-Náhuatl, que según este libro el significado de la palabra es “Príncipe de las flores”.



Otra versión aceptada y con menos auge que las anteriores es la derivada de los vocablos Ulhuapani y Uruapani, ambos vocablos se refieren a la exuberante vegetación de la región de la ciudad; el significado literal de estos dos vocablos es “Lugar que siempre florece o lugar donde los árboles reverdecen”, aunque la versión mas aceptada es "Lugar de los frutos eternos"



2.3. Escudo de la Ciudad.



En la parte superior y coronando el escudo se encuentran los perfiles de un indio y un español, como símbolo de las raíces de la población. El símbolo de las nueve capillas originales se encuentra en la parte superior, están alrededor del pórtico de la huatapera.



Los dioses que adoraban los tarascos están simbolizados por el sol, la luna y una estrella que se encuentran en el ángulo superior derecho; tiene los colores de la bandera nacional y vemos también los símbolos de la orden franciscana a la que perteneció el fundador de la ciudad; en la parte inferior del escudo tiene dos cuarteles: por un lado el volcán Paricutín, la Tzararacua y el río Cupatitzio que nace en el corazón de la ciudad.En el cuartel derecho de esta parte inferior, se encuentra el monumento a los mártires de Uruapan; el escudo termina con ramas de cafeto y al centro una pieza de las lacas que se elaboran en la ciudad, al final un listón que dice “salvaguardia del espíritu, la tradición y la mexicanidad”.